Putas Todas


Ellas eran las putas más grandes de esta jodida ciudad, aunque nunca te hablaran de ellas, como yo. Estoy segura de que las podrías reconocer sin una pizca de duda.
Yo había llegado nueva a esta ciudad, mi vida anterior tengo que confesar que no fue de santa ni mucho menos, pero cada uno hace lo que puede para sobrevivir lo que ahora importaba era que había cambiado y ahora era la mítica niña bien que se busca su futuro aun asi tengo que confesar que me quedaba mi rebeldía y la cabezonería de hacer siempre las cosas a mi manera sin depender d nadie.
Seria una historia muy larga si te constase cómo y cuando sucedió y como yo estuve dispuesta a perder todo lo que fui y era por alguien, creo q llegados a este punto no importa, lo único que quiero que sepas es que esas malditas zorras han vaciado mis esperanzas y lo único que quiero es que sueltes a ese maldito perro y que las devore como ellas hicieron con mi felicidad sin dejar rastro.